El ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores de la República Bolivariana de Venezuela, Yván Gil, denunció este miércoles la vandalización de la sede diplomática del país establecida en la ciudad de Oslo, Noruega.
A través de su canal de Telegram, el Canciller detalló que la sede “fue invadida” por “elementos fascistas que se encargaron de dejar claro a qué intereses responden”. Además, recordó que la responsabilidad de la inviolabilidad de estos espacios diplomáticos corresponde al Estado Receptor, por lo que el Gobierno Bolivariano espera “den inmediatamente con los responsables de estos atentados”.
“El país y el mundo se dan cuenta de quiénes son estos desquiciados fascistas, capaces de arremeter contra los intereses del pueblo venezolano”, lamentó el Ministro, quien también se pronunció el lunes contra los ataques de las sedes consulares de Venezuela en Lisboa (Portugal), Frankfurt (Alemania), Medellín (Colombia), Vigo (España) y San José (Costa Rica).
“El odio fascista inoculado, estimulado y protegido por años en el exterior es la principal causa de estas agresiones”, así como “el mismo daño a nuestras sedes diplomáticas, quieren hacerle a nuestra amada Patria Bolivariana”, cuestionó en esa oportunidad el titular del despacho diplomático.